El gel curativo Revamil Está elaborado a partir de miel preparada para uso médico. Está indicado en heridas crónicas (escaras, úlceras de diversos tipos), heridas infectadas, lesiones quirúrgicas oncológicas, lesiones inducidas por radiaciones así como pequeñas quemaduras (1.º y 2.º grado). La miel para uso médico tiene muchas virtudes: de hecho, es antibacteriana y antiinflamatoria. Esta miel crea un ambiente propicio para una curación óptima interviniendo en todas las fases del proceso. Aplicado sobre la herida, realiza el desbridamiento, es decir, la eliminación del tejido muerto. Inhibe el desarrollo de bacterias que causan malos olores. Reduce el dolor que la lesión puede provocar. Protege la herida y la mantiene húmeda, condición favorable para el proceso de curación. Finalmente, genera una sustancia que, al estimular la actividad de los fibroblastos, permitirá completar rápidamente las fases de granulación y epidermización, necesarias para la formación de la cicatriz. El gel curativo Revamil Está elaborado a partir de miel pura. Fue producido en condiciones controladas, en invernaderos. Este particular proceso de producción garantiza que Revamil esté libre de residuos de pesticidas y metales pesados y que su calidad sea constante y reproducible. Esto es lo que permite su uso en un entorno médico.
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